Sondeos: Muerte de Nisman sigue afectando al gobierno argentino

La muerte del fiscal del caso AMIA, Alberto Nisman, de la que hoy se cumplen dos semanas, continúa afectando al gobierno argentino, al que una parte de la sociedad responsabiliza del hecho, según dos encuestas publicadas hoy en la prensa.

00123532-original.jpeg

Alberto Nisman.

Según una encuesta de la consultora Management & Fit difundida hoy por el diario "Clarín", el 84.4 por ciento de los encuestados cree que la muerte de Nisman afecta a la imagen de la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner.

En tanto, el 19 por ciento de las personas que participaron en otro sondeo de la consultora Carlos Fara y Asociados identificó al gobierno nacional como "el responsable de la muerte del fiscal Nisman", mientras que otro 5 por ciento acusó directamente de lo ocurrido a la jefa de Estado, publicó el portal de noticias "Infobae".

Si bien los indicios principales de la investigación apuntan a que se trató de un suicidio, el sondeo de esa consultora destacó que solo el 10 por ciento de los encuestados respalda esa posición. Por el contrario, el 72 por ciento cree que fue un homicidio.

El cuerpo de Nisman fue encontrado sin vida, con una herida de arma de fuego en su cabeza, el domingo 18 de enero pasado en el departamento que habitaba en Puerto Madero, uno de los barrios más exclusivos y vigilados de Buenos Aires.

Nisman tenía previsto presentarse un día después en el Parlamento para explicar su última denuncia realizada como parte de la investigación del atentado a la AMIA, cometido en 1994 y que provocó 85 muertes.

La denuncia involucraba a Kirchner y al ministro de Relaciones Exteriores argentino, Héctor Timerman, en un plan secreto para encubrir a los presuntos responsables iraníes del ataque.

Junto al cuerpo de Nisman se halló una pistola calibre 22 que un día antes, según relató a la Justicia, le había prestado Diego Lagomersino, un colaborador suyo en la fiscalía. Los peritos señalaron que la bala que mató a Nisman fue disparada con ese arma.

Las mismas pericias indicaron, sin embargo, que en las manos del fiscal no se hallaron rastros de pólvora, aunque tampoco se registraron evidencias de que otra persona estuviera en el lugar en el momento de la muerte. (DPA)