"Negociaron conmigo (la reunión) también diplomáticos estadounidenses. Se lo dije a Edward pero no quiso reunirse con ellos. Argumentó que la campaña desatada contra él por el Departamento de Estado de Estados Unidos demuestra una idea preconcebida hacia su postura de defensor de derechos humanos", señaló Kucherena.
Al mismo tiempo, el jurista descartó que las nuevas filtraciones en los medios occidentales atribuidas a Snowden fueran efectuadas por el joven informático desde Rusia.
"Si algo aparece en los medios, se basa en los materiales que (Snowden) remitió a los medios de comunicación cuando estaba en Hong Kong", apuntó.
El ex contratista de la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense, perseguido por la Justicia su país, obtuvo refugio temporal en Rusia a condición de no revelar nuevos datos sobre la actividad de los servicios de inteligencia norteamericanos ni perjudicar de ninguna manera los intereses de Estados Unidos.
Kucherena aclaró que el informático, tras permanecer atrapado durante más de un mes en la terminal de tránsito del aeropuerto Sheremétievo de Moscú, optó finalmente por pedir refugio a Rusia por la imposibilidad de viajar a América Latina, donde varios países, entre ellos Venezuela y Bolivia, le habían ofrecido asilo político.
"El nivel de la amenaza contra él sigue siendo alto aún a día de hoy. En la zona de tránsito era consciente que le persigue una gran potencia, que puede emplear todos los medios y métodos para atraparlo", afirmó.
El abogado reiteró que el fugitivo "permanece en un lugar seguro" a la espera de poder reunirse con su padre, que viajará pronto a Rusia desde Estados Unidos.
En la actualidad, "se recupera de la pesadilla que tuvo que pasar", trata de adaptarse a su nueva vida en un país desconocido, aprende su idioma y lee su literatura, eso sí, de momento en inglés, según Kucherena.
Snowden, de 30 años, aterrizó en Moscú el 23 de julio pasado, procedente de Hong Kong, en su huida de la Justicia estadounidense después de haber revelado una trama de espionaje global de los servicios secretos de su país.
Permaneció hasta el 1 de agosto en la zona de tránsito del aeropuerto moscovita de Sheremétievo hasta que recibió el refugio temporal de Rusia.
El caso ha levantado un conflicto diplomático entre Washington y Moscú y la anulación de la cumbre bilateral que el presidente Barack Obama tenía previsto celebrar con Vladímir Putin a principios de septiembre en la capital rusa.