Los expertos, que iban en dos coches, tuvieron que regresar a Donetsk cuando a unos 20 kilómetros de la ciudad fueron parados por rebeldes prorrusos que les impidieron seguir a causa de los combates en el área. Es el cuarto día consecutivo en que no consiguen llegar al lugar.
Los miembros de la OSCE iban para controlar que el acceso fuese seguro para los foresenses y policías holandeses que quieren recoger los restos de las víctimas que aún siguen allí desde la tragedia, ocurrida el 17 de julio, e investigar las causas de la caída del avión, que se sospecha fue derribado por un misil. (DPA)