El misil se lanzó desde una rampa móvil en la estación espacial de Plessezk, en el norte de Rusia, dijo el portavoz. Poco después, el misil cayó a unos 9,000 kilómetros en la zona de entrenamiento de tropas de Kura, en la península de Kamchatka, en el lejano oriente.
El objetivo del ensayo es analizar la fiabilidad de la técnica, dijo Yegorov. El nuevo misil pretende aumentar la fuerza militar de Rusia y la seguridad del país y de sus aliados. Sin embargo, al parecer el misil se diseñó principalmente para evitar el previsto sistema de defensa antimisiles en Europa, según se dijo.
El RS-24 Jars (código OTAN: SS-27 Mod-2) sustituirá al anticuado Topol. Los expertos ven en los reiterados ensayos misilísticos una demostración de fuerza de Moscú en el marco del conflicto ucraniano. (DPA)