El lanzamiento de la nave de carga se efectuó con una cohete Soyuz-2.1 desde la rampa 31 del cosmódromo de Baikonur (Kazajistán).
La Progress llevará a la plataforma orbital una reserva de nitrógeno para completar la atmósfera de la estación y un conjunto de materiales para sellar la cámara de transición del módulo ruso Zvezdá, donde hace meses se detectó una pequeña fuga de aire.
Además, la nave automática transporta más de 600 kilogramos de combustible y 420 kilogramos de agua, así como otros elementos imprescindibles para el funcionamiento de la estación.
En total, en sus bodegas la Progress lleva más de 2.5 toneladas de carga, que incluye diversos equipos científicos, entre ellos un aparato llamado "Fotobiorreactor", pare efectuar experimentos de obtención de oxígeno con la ayuda de algas y bacterias.
Los tripulantes de la EEI recibirán también el sistema de prueba "Biodegradación", que permitirá estudiar la composición de los microorganismos presentes en la atmósfera de la plataforma y estudiar su efecto en los materiales con la que ha sido construida.
La Progress, después de dos días de vuelo autónomo, se acoplará el miércoles a la 06:20 GMT al módulo Pirs del segmento ruso de la EEI.
Actualmente, la Estación Espacial Internacional cuenta con siete tripulantes: los rusos Serguéi Rizhikov (comandante) y Serguéi Kud-Sverchkov, los estadounidenses Kathleen Rubisn, Shannon Walker, Michael Hopkins y Victor Glover, y el japonés Soichi Noguchi.
La EEI, un proyecto de más de 150,000 millones de dólares, está integrada por 15 módulos permanentes y orbita la Tierra a una distancia de 400 kilómetros y una velocidad de más de 27,000 kilómetros por hora.