Dado que el brote del virus aún representa un peligro, los alumnos de los 5,800 establecimientos educativos debieron desinfectarse las manos y tomarse la temperatura antes de ingresar, a fin de detectar posibles casos de la enfermedad y evitar contagios.
La fiebre suele ser el primer síntoma del virus. Si bien en Liberia no se han registrado últimamente nuevos casos, el ébola ya ha matado a más de 9,200 personas en África occidental durante este último brote.
Aquellos alumnos que se nieguen a respetar las medidas de higiene no podrán ingresar en las escuelas, aseguró el viceministro de Educación, Ramses Kumbuyah, quien además comunicó que por el momento se evitarán las prácticas deportivas como el fútbol y el baloncesto.
Las escuelas de Guinea también reabrieron en enero luego de estar unos siete meses sin clases. Sierra Leona, también severamente afectada por el brote, apunta a reiniciar las actividades escolares en marzo. (DPA)