El argelino, de 33 años, fue arrestado el domingo pasado en el barrio de Pangrati tras emitirse una orden de detención europea, indicó la agencia, que citó fuentes judiciales.
Se espera que las autoridades griegas decidan en los próximos días sobre la extradición del argelino, a quien las autoridades belgas acusan de estar involucrado en una célula yihadista que fue desmantelada la semana pasada.
La policía belga llevó adelante una serie de operativos antiterroristas por supuestos indicios de ataques a agentes de policía en las calles y comisarías del país. En uno de los operativos en la ciudad de Verviers murieron dos presuntos yihadistas.
Medios belgas informaron que los presuntos ataques fueron ideados en Grecia.
Cuatro hombres de origen magrebí fueron detenidos por la policía griega el fin de semana, pero tres de ellos fueron puestos en libertad más tarde.
Por otra parte, las autoridades holandesas informaron hoy de la detención de un joven de 18 años en Utrecht, también bajo la sospecha de estar involucrado en la trama belga.
"El sospechoso pertenece probablemente a una célula yihadista", dijeron los fiscales sobre el hombre, cuyo pasaporte fue hallado durante la operación antiterrorista en Verviers.
La policía holandesa dijo que allanó la casa de los padres del detenido y que confiscó su computadora portátil y teléfonos móviles. Sus padres lo habían registrado como desaparecido en septiembre.
La operación policial belga se produjo una semana después de los ataques terroristas en Francia. Las autoridades sin embargo aclararon que los sucesos en Bélgica no tienen vínculo alguno con lo ocurrido en París. (DPA)