Preparan bienvenida a Papa Francisco en Santuario de Virgen de Caacupé

La ciudad paraguaya de Caacupé está revolucionada, vestida en sus calles con las banderas del Vaticano, en medio de los preparativos para recibir al Papa Francisco, quien el próximo sábado oficiará aquí una misa ante un millón y medio de personas.

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Los rostros de su Santidad se multiplican en carteles que adornan la carretera que recorre los 54 kilómetros que separan a Asunción de la ciudad en donde está el Templo de la Virgen de Caacupé, santa patrona de los paraguayos.

Aquí, cada 8 de diciembre llegan multitudes para venerar a la Virgen que, según la leyenda, hace más de cuatro siglos se le apareció a un indio y lo protegió al ordenarle que se escondiera “detrás del bosque de hierba” (Ka'aguý cupe-pe en lengua guaraní) para que una tribu peligrosa no lo matara.

La Virgen de Caacupé es el equivalente de la Virgen de Guadalupe en México, y su templo es el más grande e imponente de Paraguay, destino final de la gira sudamericana que el Papa comenzó el pasado fin de semana en Ecuador y continuó la víspera y este día en Bolivia.

En estos días, la principal señal de que ya se llegó a esta ciudad de 50 mil habitantes son las banderas albiamarillas del Vaticano que se alternan con las paraguayas y que adornan las entradas de hoteles, escuelas, clínicas y de todo tipo de negocios, desde peluquerías y ópticas hasta zapaterías.

Las banderas también están colgadas en las calles de Caacupé, en donde los comerciantes tienen a la vista múltiples versiones de camisetas para todas las edades con el rostro del Papa, mensajes de bienvenida y agradecimiento, o un simple recuerdo de esta visita tan esperada.

La imagen de Francisco se replica en figuras de yeso que conviven con la Virgen de Caacupé, en gorros, en discos y películas de música cristiana, pósters, fotografías, murales y hasta en una foto tamaño natural que fue colocada a la entrada del templo.

A sabiendas de que el sábado será imposible entrar a la Basílica, este jueves comenzaron a llegar grupos de visitantes que, entre risas, se tomaron fotos con la imagen en la que el Papa está dando una bendición.

También se multiplicaron las visitas de argentinos que evidenciaron su nacionalidad y la del Papa mostrando con orgullo su bandera nacional o mostrando sus credenciales de diócesis argentinas, apenas como un adelanto del millón de personas que se espera cruzarán la frontera para venir a ver a Francisco en Paraguay.

Los mensajes de bienvenida se replican en galerías y pasillos del templo, en donde incluso se exhibe una traducción al guaraní del Padre Nuestro como prueba de no se logró eliminar esta lengua ancestral.

La entrada principal de la iglesia también tiene un mensaje guaraní en su cúpula, consagrados al servicio del reino de Dios mientras que el acceso es resguardado por vallas detrás de las cuales hay trabajadores que ultiman los preparativos custodiados por soldados.

En los alrededores de la iglesia, es evidente el despliegue de baños públicos, duchas y servicios de dotación de agua que necesitarán los peregrinos que acamparán desde el viernes en la noche para estar lo más cerca posible del Papa el próximo sábado.