La iniciativa se inaugurará el próximo 14 de febrero, día de San Valentín, con el acceso a la casa de Ara Massima, que "recuerda al tema del amor con sus varios frescos" como el del joven Narciso, explicó en un comunicado el Parque.
A partir del lunes, los visitantes que se acerquen a este importante yacimiento arqueológico podrán visitar de forma extraordinaria y junto al personal del Parque una casa distinta cada día de la semana, como la casa del cerdito, la casa del ancla o la casa del oso, que destaca por su mosaico en el suelo.
Las siete casas seleccionadas eran inaccesibles hasta ahora por tener algunos elementos de decoración delicados que no permitían abrir el espacio de forma permanente o porque todavía se encontraban en proceso de restauración.
Pero el proyecto, más allá de dar a conocer estos espacios reservados a los profesionales, tiene el objetivo de resaltar "la necesidad de continua intervención que requieren las estructuras arqueológicas".
"Las visitas darán al público una idea del complejo trabajo que se realiza diariamente en un gran yacimiento arqueológico, desde el mantenimiento hasta la investigación, que normalmente están invisibles a los visitantes", explicó el director del parque, Gabriel Zuchtriegel.