Bin Isa Al Jalifa agradeció a Pompeo los "permanentes esfuerzos" de la Administración de Estados Unidos "para promover el proceso de paz" entre israelíes y palestinos "y enfrentar las inferencias iraníes y en los asuntos regionales", según un comunicado difundido por la agencia oficial de noticias de Bárein tras el encuentro.
Aunque el monarca destacó la "importancia de intensificar los esfuerzos para poner fin al conflicto palestino israelí de acuerdo con la solución de dos Estados que logre una paz justa y global", reclamación colectiva de los países árabes en defensa de la causa palestina.
Esta paz ha de incluir "el establecimiento de un Estado palestino independiente con su soberanía cuya capital es Jerusalén Este de conformidad con las resoluciones legitimas internacionales y la Iniciativa de Paz Árabe", dijo el monarca.
Por su parte, Pompeo aseguró en Twitter que EE.UU. mantiene el "compromiso de construir la paz y la seguridad para lograr una mayor unidad entre los países del Golfo y de contrarrestar la amenaza de Irán".
Tras su visita a Baréin, adonde llegó el martes en la noche, Pompeo partió hacia Emiratos Árabes Unidos, principal parada de una gira que empezó por Israel, después de que el pasado día 13 emiratíes e israelíes anunciasen la normalización de relaciones.
En su anterior parada, en Sudán, la segunda de la gira tras Israel, Pomeo se encontró con la negativa el gobierno de transición de ese país a normalizar sus relaciones con Israel, un objetivo que ha traído a su gira por Oriente Medio y que por le momento no está encontrando nuevos suscriptores.