"Confío en que veremos a otros países árabes unirse", señaló el estadounidense durante una declaración a los medios junto al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
"La oportunidad para que reconozcan al Estado de Israel y trabajen junto a él no solo aumentará la estabilidad en Oriente Medio sino que también mejorará la vida de la gente de sus propios países", agregó y describió el acuerdo de normalización anunciado hace diez días como "un gran paso".
Además, Pompeo hizo referencia a la polémica generada en torno a una posible cláusula que permitiría a Estados Unidos vender cazas F-35 y otras armas avanzadas a Abu Dabi, levantando el veto y rompiendo la norma que obliga a Washington a garantizar que Israel tendrá una ventaja en tecnología militar en la región.
"Estados Unidos tiene un requisito legal con respecto a la ventaja militar cualitativa (de Israel) que seguiremos honrando. Pero también tenemos una relación de seguridad de más de veinte años con los Emiratos Árabes Unidos", señaló y reconoció que su país "revisará" ese veto para asegurarse de que están entregando a EAU el equipamiento necesario para defenderse de la amenaza iraní.
Netanyahu, por su parte, reiteró que el acuerdo de normalización "no incluyó la aceptación israelí de ninguna venta de armas" y volvió a dejar claro que la posición de su Gobierno sobre la protección de su ventaja militar en la región no ha cambiado, algo que también reiteró a Pompeo durante su reunión.
El mandatario israelí celebró la decisión de EE.UU. de iniciar el proceso en la ONU para restablecer las sanciones internacionales contra Irán que, de levantarse, permitirían a Teherán obtener "tanques, misiles y defensas antiaéreas para continuar su campaña de agresión en la región y en el mundo", por lo que sería "absurdo".
Sobre este tema, Pompeo apuntó que Estados Unidos "utilizará todas las herramientas" a su alcance para garantizar que Irán no obtiene armas nucleares y que confía en que lo lograrán.
Tras su parada en Israel, en la que también abordó su preocupación por la creciente inversión y presencia de China en el país, Pompeo viajará a Emiratos Árabes Unidos y a Sudán y Baréin, dos de los países que se especula podrían seguir los pasos de Abu Dabi.