Polonia se mostró preocupada por los planes de Rusia de desplegar misiles tácticos en el vecino enclave báltico ruso de Kaliningrado como respuesta al escudo antimisiles de Estados Unidos y de sus aliados de la OTAN.
"Nos preocupa la perspectiva de la militarización de la región de Kaliningrado, sobre todo el despliegue de los (misiles) ofensivos Iskander", dijo el ministro polaco de Asuntos Exteriores, Radoslaw Sikorski, en una entrevista con la agencia Interfax.
El titular de Exteriores polaco también expresó su esperanza de que Moscú no vea como "enemigo" a la OTAN y afirmó que a la hora de dialogar "la vía de los ultimátum es innecesaria" tanto en las relaciones entre Rusia y Polonia como entre Rusia y la Alianza.
El presidente ruso, Dmitri Medvédev, dispuso a finales de noviembre desplegar radares contra misiles en respuesta a la negativa de Estados Unidos a dar garantías por escrito de que su sistema de defensa antimisiles en Europa no amenaza al poderío nuclear ruso.
También advirtió de que si esas medidas son insuficientes, Rusia emplazará sistemas Iskander y otro armamento de ataque que garantice la destrucción del componente europeo del sistema antimisiles.
Con anterioridad, Medvédev llamó a crear un sistema conjunto OTAN-Rusia, en el que cada una de las partes se encargaría de la seguridad de un sector del continente, propuesta rechazada por la Alianza Atlántica y Estados Unidos.
El mandatario ruso ha advertido en los últimos meses de que si para 2020 no hay acuerdo el mundo se verá abocado a una nueva carrera armamentista, similar a la protagonizada por Moscú y Washington durante la Guerra Fría.