El lanzamiento del vehículo espacial, que había sido detectado por Japón y por Corea del Sur, falló debido a un error en la tercera fase del mismo, según informó la agencia norcoreana KCNA, que también anunció los planes de volver a intentar poner en órbita el satélite el próximo octubre.
El nuevo intento de poner en órbita un satélite de inteligencia ha tenido lugar tres meses después de que el régimen norcoreano tratara de lanzar un dispositivo similar el pasado 31 de mayo, pero el cohete que lo transportaba se estrelló en el mar debido a un fallo de sus motores.
Pionyang explicó que su satélite espía, el Malligyong-1, fue lanzado a bordo de un nuevo tipo de cohete espacial llamado Chollima-1, y aunque la primera y la segunda fase del mismo volaron "con normalidad", en la tercera fase tuvo lugar "un error en el sistema de propulsión de emergencia".
La Agencia de Desarrollo Espacial de Corea del Norte señaló que "la causa del accidente no supone un gran problema en términos de fiabilidad del motor", y señaló que llevará a cabo un nuevo lanzamiento en octubre "tras investigar en profundidad las causas" y "tomar contramedidas", según la información distribuida por KCNA y recogida por Yonhap.
El Ejército sucoreano, por su parte, señaló también que el intento de lanzamiento de un cohete espacial había resultado fallido.
Previamente, el Estado Mayor Conjunto (JCS) surcoreano había informado de la detección del lanzamiento del cohete norcoreano en torno a las 3:50 hora local de este jueves (18:50 GMT del miércoles) desde el noroeste del país y en dirección sur.
Hacia esa misma hora se activó el sistema de alerta antimisiles nipón J-Alert en la prefectura suroccidental de Okinawa, urgiendo a los residentes a tomar refugio ante el posible impacto de un proyectil, aunque el aviso se retiró minutos después.
El Gobierno de Japón, que consideró el lanzamiento como un misil balístico, informó asimismo de que el supuesto vehículo espacial norcoreano sobrevoló la prefectura de Okinawa y que no había detectado ningún daño en su territorio ni en sus aguas.
El pasado martes la Guardia Costera de Japón fuera avisada por Pionyang de su intención de lanzar un satélite en algún momento entre este jueves y el 31 de agosto, para lo que designó tres zonas de riesgo marítimo (dos al oeste de la península de Corea y una al este de la isla filipina de Luzón) ante el riesgo de la caída de restos del cohete durante el lanzamiento.
Corea del Norte había lanzado anteriormente seis cohetes espaciales con los que aseguró que buscaba poner satélites de observación en órbita, incluido el fallido del pasado mayo.
La comunidad internacional vigila con atención este tipo de lanzamientos norcoreanos vinculados al sector satelital, que consideran test encubiertos de tecnología para misiles balísticos.