En su intervención ante miles de feligreses en la Plaza San Pedro tras concluir el Ángelus dominical, el Sumo Pontífice expresó: 'rezo por los difuntos y los heridos y por todos los que han perdido su casa. Dios consuele a las familias y apoye a los socorristas. Les estoy muy cercano'.
El deslizamiento de tierra causado por las intensas lluvias sepultó unas 40 viviendas en la aldea de Xinmo, condado de Maoxian.
Fuente: Prensa Latina