"El barco de Europa ha naufragado y sus posiciones en la política y economía mundial se han quebrantado" ante otras potencias, aseguró durante la inauguración de un monumento en recuerdo del tratado de Trianon, por el que Hungría perdió en 1920 dos tercios de su territorio tras la I Guerra Mundial.
Según el primer ministro, la actual pregunta es si los líderes de la Unión Europea podrán renovar sus políticas y volver a lo que él considera son sus valores tradicionales.
"La UE renunció a los valores de la Europa cristiana e intenta aplicar las políticas arco iris, fomentar la inmigración y las sociedades abiertas", opinó Orbán durante la ceremonia, dentro de los actos por el día nacional de Hungría.
Frente a esas prácticas, dijo, son los países de Europa Central los que mantienen los valores cristianos y nacionales.
Así, dijo que el monumento inaugurado hoy es un llamamiento a esos países a mantenerse en "un mundo cristiano" y cooperar para defender una independencia nacional que sea la base de la unida de la UE.
En las paredes del monumento se han grabado los nombres de las 12.537 localidades que eran parte de la Gran Hungría en 1920, antes de que el país perdiera el 70 por ciento de su territorio y el 60 por ciento de su población.
"El trauma de Trianon" es un punto de referencia para muchos nacionalistas húngaros y motivo de roces con varios países, e incluso socios de la UE, como Rumanía, Eslovaquia, Serbia y Ucrania, donde hoy día viven aún casi dos millones de húngaros étnicos.
Al estallar la I Guerra Mundial, Hungría era un reino multiétnico cuyos dominios se extendían por territorios que hoy pertenecen a Rumanía, Eslovaquia, Ucrania, Serbia, Eslovenia, Croacia e incluso Austria, y en el que apenas la mitad de sus 21 millones de habitantes tenía al húngaro como lengua materna.
El monumento iba a ser inaugurado en junio en el aniversario del acuerdo de Trianon, pero debido a la pandemia de coronavirus la ceremonia se pospuso hasta hoy, cuando Hungría celebra a San Esteban que reinó entre 1000 y 1038 y fundó el Estado magiar.