En un mensaje de fin de año dirigido a los mexicanos residentes en la Unión Americana, recordó que “como descendiente de familias refugiadas que emigraron a México escapando del fascismo y el genocidio, tengo un compromiso profundo y personal con la protección de los migrantes”.
Tras ofrecer su compromiso con las banderas del arduo trabajo, la entrega y la honradez que enarbolan a diario las comunidades mexicanas a ambos lados de la frontera, destacó que entidades como California, Maryland, Illinois y Rhode Island aprobaron medidas que permitirán a los jóvenes indocumentados proseguir su educación en universidades estatales.
Además varias ciudades, desde Nueva York hasta Dayton, Ohio, han manifestado su compromiso por combatir la intolerancia y ofrecer espacios de inclusión e integración, al tiempo que dan la bienvenida a sus inmigrantes, a quienes reconocen sus aportaciones.
Sin embargo, continuó el representante del gobierno mexicano en Estados Unidos, también se reproducen legislaciones estatales antiinmigrantes similares a la SB1070 elaborada y aprobada en Arizona.
“Las acciones de protección consular que llevamos a cabo en 2010 fueron fortalecidas y multiplicadas en 2011 de cara a cinco leyes estatales que fueron promulgadas en Utah, Indiana, Carolina del Sur, Georgia y Alabama”, comentó.
En 2012, el reto será reforzar y ampliar la estrategia a través de un diálogo sólido con la sociedad sobre los efectos perniciosos de estas propuestas en la relación bilateral, detalló el embajador.
Aún así, destacó que algunos estados rechazarán medidas de este tipo y la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para abordar en 2012 uno de los litigios sobre la constitucionalidad de la SB1070 en Arizona, marcará un parteaguas.
Pero paradójicamente, estas medidas se dan cuando disminuye el flujo de migrantes mexicanos a Estados Unidos, y por primera vez en décadas la tasa neta de migración de México a Estados Unidos es igual a cero.
Esta estabilidad en los flujos migratorios debería abrir una ventana de oportunidad para repensar los marcos normativos que regulan la migración, así como para detonar el potencial económico que representa el carácter complementario de las economías, mencionó.
Sarukhán Casamitjana advirtió también que el año electoral en Estados Unidos será utilizado por algunos “para demonizar al inmigrante y culparlo injustamente de los retos que enfrenta el país”.
“Quiero ser muy claro al respecto. No vamos a permitir que se use al inmigrante mexicano como chivo expiatorio en las campañas electorales”, se comprometió.
“Seguiré usando todos los foros a mi alcance para reiterar mi mensaje de estos últimos años: los inmigrantes son gente que viene a trabajar en forma honrada, que contribuye a sus nuevas comunidades”, aseveró.
Al referirse a las elecciones que también ocurrirán en México, el embajador recordó que por segunda vez en la historia, los mexicanos votarán desde el extranjero, aunque aún no se permite al Instituto Federal Electoral (IFE) credencializar a quien no viva en México.
Advirtió que “he girado instrucciones contundentes e inequívocas al personal de la embajada y Red Consular: no se tolerará el proselitismo electoral, ni que de manera inescrupulosa alguien condicione los servicios consulares que brindamos en función de preferencias políticas”.
Por último, el diplomático recordó a los mexicanos que viajarán a México en estas fechas pasar al consulado previamente, para informarse sobre sus derechos y obligaciones al ingresar a México y, con ello, garantizar una estancia segura.