Las fuerzas de seguridad pidieron a los residentes de la ciudad no salir de sus casas. La agencia oficial LANA señaló que varios "revolucionarios" de Bengasi habían tomado las armas para apoyar al Ejército. A mediodía de hoy (local) la situación había vuelto a la calma.
En Trípoli se informó que los combates comenzaron el domingo por la tarde entre el Ejército y el grupo yihadista Ansar al Sharia, creado durante la revolución contra Muamar al Gadafi en 2011. El detonante fue la negativa de la milicia a entregar a los soldados sus puestos de control.
Un miembro del consejo municipal de Bengasi señaló a dpa que en los últimos días los combatientes de Ansar al Sharia intentaron hacer gala de su poder en la ciudad después de que otras milicias empezaran a retirarse.
Algunos políticos locales anunciaron que seguirán el ejemplo de la capital, Trípoli, y que comenzarán una huelga indefinida que dure hasta que se disuelvan todos los grupos armados no regulares.
El desarme de las milicias es hasta ahora el principal obstáculo para el gobierno de transición del primer ministro Ali Seidan. En Trípoli, las milicias de ciudades como Misrata y Al Sintan accedieron a abandonar la ciudad hace unos días únicamente debido a que los disparos mortales que hicieron contra manifestantes generaron tal ola de protesta popular que tuvieron que ceder.
En Bengasi, donde comenzó el levantamiento contra Gadafi en febrero de 2011, la situación de seguridad es especialmente mala.