"Queremos que Grecia sea económicamente fuerte, tenga crecimiento, que acabe con el desempleo y vuelva a ofrecer oportunidades a los jóvenes, para ello se necesitan reformas estructurales", declaró Merkel en la rueda de prensa conjunta.
Ambas partes se mostraron de acuerdo en la necesidad de contar con una cooperación de confianza para poder tratar los problemas actuales.
Sin embargo, Merkel recordó que Alemania no es el país que decide sobre la ayuda a Grecia, sino las instituciones que forman la troika de acreedores. "Son ellos quienes deciden si el programa de reformas es correcto y suficiente", declaró. "Atenas debe cumplir también sus compromisos", agregó. (DPA)