Llega a Brasil el primero de 36 cazas de combate Gripen encomendado a Suecia

El primero de los 36 cazas de combate Gripen que Brasil le encomendó al fabricante sueco SAAB llegó este domingo a Río de Janeiro en un barco procedente de ese país europeo, informó la Fuerza Aérea.

Etiquetas: 

Tras casi un año de vuelos de prueba en Suecia, el Gripen comenzará a ser examinado en el espacio aéreo brasileño.

La aeronave salió el 29 de agosto desde el puerto de Norrköping y llegó hoy al puerto de Navegantes, en el sureño estado de Santa Catarina, según confirmó a través de su cuenta en Twitter, el comandante general de Apoyo Logístico de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), teniente brigadier del aire Carlos de Almeida Baptista Junior.

Esta semana, el Gripen se transportará al aeropuerto de esa misma ciudad, donde será montado y realizará su primer vuelo en Brasil hasta la planta que el fabricante brasileño de aviones Embraer -socio de SAAB en el proyecto de desarrollo y producción de los cazas- tiene en Gavião Peixoto, en el interior del estado de Sao Paulo, y que servirá como base para el proceso de vuelos de prueba en el país.

El avión que arribó hoy a Brasil viene siendo probado con éxito desde agosto del año pasado en la base sueca de Linköping.

Esta primera aeronave, designada como F-39 y matriculada como FAB 4100, requiere de al menos 900 vuelos de prueba antes de que pueda ser certificada y entregada oficialmente a la Fuerza Aérea.

El modelo para Brasil (Gripen E), una nueva versión del cazabombardero Gripen de SAAB, fue desarrollado en conjunto por ingenieros de la empresa sueca y de Embraer.

Brasil encomendó 36 aeronaves de combate, de ellas 28 monoplazas y 8 biplazas.

Tras un primer lote de aviones fabricados en Suecia, la producción será trasladada a las plantas en Brasil de Embraer, el tercer mayor fabricante de aviones del mundo y el principal beneficiario del acuerdo de transferencia de tecnología que SAAB firmó con el Gobierno brasileño.

El último lote de quince unidades será totalmente fabricado en la planta de Embraer en Gavião Peixoto con los ingenieros suecos actuando tan sólo como consultores.

De acuerdo con los ejecutivos suecos, SAAB tiene negociaciones adelantadas para venderle el modelo brasileño a países como Austria y Bulgaria, y planea utilizar su acuerdo con la Embraer como una plataforma de exportación para producir cazas en Brasil y venderlos a otros países latinoamericanos.