Líderes israelíes dividos entre cómo y cuándo acabar ofensiva de Gaza

El gobierno de Israel está profundamente dividido sobre si debe continuar con la ofensiva militar en la Franja de Gaza que ya dura casi tres semanas y, en caso positivo, sobre cómo hacerlo.

Etiquetas: 

Algunos miembros de los siete que integran el gabinete de seguridad del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, presionan para que se intensifique el operativo terrestre en Gaza. Otros, sin embargo, están a favor de una retirada el jueves.

Estas divisiones surgieron tras la reunión el domingo de este gabinete que decide temas de seguridad. La reunión continuó hasta bien entrada la noche y concluyó sin hacer públicas sus conclusiones.

Los que están a favor de continuar con la ofensiva consideran que Israel debería apostar por destruir la parte principal de los túneles que los milicianos en Gaza usan para infiltrarse en Israel y no definir un objetivo más amplio de la ofensiva terrestre.

Otros, entre ellos el ministro de Asuntos Exteriores, Avigdor Lieberman, un defensor de la línea dura, así como el ministro de Economía, Naftali Bennett, se han mostrado públicamente a favor de seguir en Gaza el tiempo que sea necesario hasta acabar con Hamas, el movimiento radical palestino que controla el territorio costero palestino.

"Israel se encuentra ante una encrucijada histórica", escribió el domingo Bennett en su página de Facebook. "Podemos hacer que Hamas se rinda", agregó. Israel tiene la oportunidad de demostrar a nuestros enemigos, a nuestros vecinos a todo el mundo y a nosotros mismos que podemos derrotar al terrorismo islamista. Por primera vez en años se puede lograr".

El ministro compara la guerra con un "combate de boxeo" y aseguró que parar ahora y aceptar una tregua temporal sin garantías a largo plazo de que Hamas pondrá fin al lanzamiento de cohetes a Israel, sería como "ayudar al rival a levantarse tras caer al suelo y dejarlo beber y recuperarse".

"Después de tres semanas de combate, tras haber pagado un elevado precio, hemos llegado a la siguiente situación: Hamás ha sufrido un duro golpe, pero no ha sido eliminado", dijo.

Bennett aboga por retomar el control de la Franja de Gaza, nueve años después de que las fuerzas israelíes se retiraran y los colonos se marcharan del territorio palestino.

Por su parte, el ministro de Defensa israelí, Moshe Yaalon, el de Finanzas, Yair Lapid, y la ministra de Justicia, Tzipi Livni, se inclinan a favor de poner punto a la ofensiva antes de que concluya esta semana.

Pero la opinión pública israelí está más bien con los defensores de las posturas más inflexibles. Muchos israelíes son de la opinión de que la muerte de los 43 soldados que han perdido la vida desde que comenzó la ofensiva no habrá servido de nada si Hamas y otros grupos armados en Gaza reanudan los ataques con cohetes en cualquier momento.

En una encuesta encargada por el canal israelí Channel 10 se señalaba hoy que el 87 por ciento de los israelíes apoyan el operativo militar. Una amplia mayoría (69 por ciento) está a favor de que Israel derroque a Hamas.

"Estoy en contra del alto el fuego", dijo a dpa Ariel Avdayev (de 62 años), propietario en Haifa de una tienda. "¿Para qué? ¿Sólo para que vuelvan a comenzar después? Vamos a dejar que pasen 500 años antes de que vuelvan a comenzar con nosotros!".

Preocupado porque Netanyahu se deje llevar por la presión pública y a pesar de que la cifra de muertos en Gaza ya supera el millar de palestinos, el presidente estadounidense, Barack Obama, conversó por teléfono con el primer ministro israelí el domingo.

Obama exigió claramente un alto el fuego humanitario inmediato y sin condiciones previas. Obama respaldó "el derecho de Israel a defenderse" y condenó los lanzamientos de cohetes de Hamas", pero también expresó su "seria y creciente preocupación por el creciente número de civiles palestinos muertos", según el comunicado de la Casa Blanca.

El diario de mayor tirada de Israel "Yediot Ahronot" interpretaba hoy la llamada de Obama como "una luz roja" a Israel en contra de seguir adelante con al ofensiva.

Desde la pasada noche Israel viene siguiendo un alto el fuego no oficial por el inicio de la fiesta musulmana Eid el Fitr (el fin del mes de ayuno Ramadan), que dura tres días.

Con la tregua, Israel ha suspendido los ataques aéreos y de artillería, pero sigue destruyendo los túneles de Gaza y responde a ataques aislados de cohetes. Las próximas 24 horas podrían ser claves mientras el gabinete de seguridad sigue con sus deliberaciones. (DPA)