Coronel, cuyo caso fue desclasificado la noche del miércoles por orden judicial, está acusada de dos delitos de conspiración, uno para distribuir narcóticos en EE.UU. y otro para blanquear dinero, y un tercer delito por realizar operaciones con propiedades de un narcotraficante extranjero importante.
La esposa del exlíder del cártel de Sinaloa, de 31 años y con doble nacionalidad mexicana y estadounidense, respondió escuetamente al juez Rudolph Contreras, que aceptó su declaración, en una vista retransmitida por teléfono en la que también dijo haber colaborado en las actividades y el escape de prisión de su marido en México en 2015.