"Las declaraciones pesan más que los rumores para la Comisión", subrayó el portavoz Oliver Bailly, recordando que las principales agencias han desmentido las especulaciones y han confirmado que la nota francesa AAA es estable.
Bailly insistió en que Bruselas "no escucha" los rumores sobre la "degradación de tal o cuál agencia a tal o cuál país" y, por tanto, no está dispuesta a hablar de posibles planes basados en esos escenarios hipotéticos.
Las bolsas europeas cayeron ayer más de un 5 por ciento en una jornada marcada por los rumores de una rebaja de la calificación de la deuda de Francia, pese a los esfuerzos de París por tranquilizar la situación.