“Es un paso importante en la dirección correcta, el cual fomentará la alianza estratégica entre Bagdad y Washington en muchas esferas, sobre todo en la lucha contra el terrorismo”, informó la cancillería iraquí en un comunicado difundido por el portal Iraqi News.
El vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores, Ahmed Gamal, expresó “gran consuelo” por excluir a Irak del veto migratorio de Trump.
El mandatario estadunidense reemplazó este lunes su polémico veto migratorio con una nueva orden ejecutiva que suspende durante 90 días la entrada de viajeros y refugiados de seis de los siete países originales de mayoría musulmana, con la excepción de Irak.
Con la salida de Irak de la lista, ahora la orden migratoria, que entrará en vigor el próximo 16 de marzo, prohíbe la entrada a Estados Unidos de ciudadanos de seis países - Irán, Libia, Siria, Sudán, Somalia y Yemen- durante 90 días, además suspende durante 120 días el ingreso de refugiados.
El primer ministro iraquí, Haider al-Abadi, había exhortado a Trump a reconsiderar el veto migratorio, en tanto el Parlamento iraquí pidió al gobierno adoptar medidas de reciprocidad y prohibir la entrada a Irak de ciudadanos estadunidenses.
Según medios, la exclusión de Irak obedece a la presión del Pentágono y del Departamento de Estado que destacaron el papel clave de Bagdad en la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
