"Tras las revleaciones, aclaramos las cosas. Obama y yo aclaramos las cosas. Eso es algo del pasado (...) La confianza mutua se ha restaurado", dijo Hollande en rueda de prensa conjunta con Obama.
Eso sí, precisó, dicha confianza debe basarse no sólo en intereses nacionales sino en la "protección de la vida privada, de datos privados, en el hecho de que cualquier individuo, pese a los avances técnicos, debe poder estar seguro de que no se le espía, esos son los principios que nos unen.
Obama por su parte aseguró una vez más su "fuerte compromiso" para garantizar que la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense realice su trabajo de forma "compatible con nuestras alianzas y amistades" con países como Francia.
"Estamos comprometidos en asegurar que estamos protegiendo los derechos de privacidad no sólo de nuestros propios ciudadanos sino de gente en todo el mundo (...) respetamos el derecho a la privacidad (de los franceses) y vamos a asegurarnos de que nuestras reglas atienden esas inquietudes sobre privacidad", aseveró.
Aun así, subrayó la importancia de continuar la vigilancia para impedir ataques terroristas y, en este sentido, la necesidad de "seguir persiguiendo robustamente las pistas específicas" que se obtengan mediante la inteligencia. En ese marco, negó rotundamente que Washington mantenga algún tipo de acuerdo concreto de no espionaje con algunos de sus aliados, como es el caso de Londres.
"No hay ningún país con el que mantengamos un acuerdo de no espionaje", dijo Obama al respecto. (DPA)