Se presume que no se cumplieron con las reglas de seguridad establecidas, dijo hoy un portavoz de los CDC.
Los 75 empleados están siendo vigilados por los médicos y algunos están recibiendo antibióticos. El vocero indicó que ninguno contrajo la bacteria y que no existe riesgo para la opinión pública.
El ántrax es una peligrosa enfermedad infecciosa, que en 2001 causó en Estados Unidos cinco muertos. Además, 21 personas enfermaron de ántrax tras manipular cartas contaminadas, que estaban dirigidas a políticos y periodistas.