EU separa reapertura embajadas y salida de Cuba de lista terrorismo

Estados Unidos quiere separar las negociaciones con el gobierno cubano para la reapertura de embajadas en Washington y La Habana del proceso de revisión que está llevando a cabo el Departamento de Estado para sacar o no a Cuba de la lista de estados patrocinadores de terrorismo.

"Son dos procedimientos separados. No los vinculamos", dijeron hoy fuentes del Departamento de Estado que pidieron el anonimato.

Sin embargo, el gobierno cubano los vincula. La Habana exige salir de "la lista negra" que elabora el Departamento de Estado como requisito para el restablecimiento de las relaciones diplomáticas bilaterales.

El viernes tendrá lugar en Washington la segunda ronda de negociaciones para restablecer relaciones diplomáticas. Se espera que el encuentro, encabezado por la diplomática cubana Josefina Vidal y por la responsable de América Latina del Departamento de Estado, Roberta Jacobson, dure seis horas.

La primera cita, que tuvo lugar el 22 de enero en La Habana, sirvió para una primera toma de contacto entre las dos delegaciones, tras el histórico acuerdo alcanzado en diciembre entre el presidente de Estados Unidos Barack Obama y su homólogo cubano Raúl Castro.

Esta segunda ronda estará centrada en los pasos a seguir para restablecer relaciones diplomáticas, que se espera que culminen con la apertura de embajadas en La Habana y Washington, tras medio siglo de ruptura y enfrentamiento ideológico. "Ambos gobiernos tienen interés en hacerlo lo antes posible", señalaron la mismas fuentes.

A falta de relaciones diplomáticas directas, Cuba y Estados Unidos mantienen actualmente sendas "Secciones de Intereses" que les permiten cumplir con servicios consulares y continuar las escasas relaciones bilaterales que mantenían hasta ahora, por ejemplo, en materia migratoria. Su personal tiene, sin embargo, serias restricciones de acción y desplazamiento por el territorio.

Las fuentes del Departamento de Estado se mostraron optimistas sobre los avances que pueden lograr en esta ronda. A Washington le gustaría llegar a un acuerdo sobre esta cuestión antes de la Cumbre de las Américas que tendrá lugar el próximo mes de abril en Panamá, pero todo depende de la marcha de las negociaciones.

Las dos delegaciones también abordarán la solución a los problemas financieros de su Sección de Intereses en Washington, que no tiene actualmente cuentas bancarias por dificultades derivadas del embargo económico de Estados Unidos.

El banco M&T cerró definitivamente sus cuentas a la Sección de Intereses el año pasado y desde entonces la legación no puede encontrar un banco que gestione sus cuentas para garantizar su normal funcionamiento y poder brindar servicios consulares plenos.

El Departamento de Estado asegura que está "ayudando" a Cuba desde hace meses a encontrar un banco, pero ellos no pueden obligar a ninguna entidad bancaria a aceptarlos como clientes. Las mismas fuentes reconocieron que quizá sería "más facil" para ellos encontrar un banco si salieran de la lista de países patrocinadores del terrorismo.

Estados Unidos incluyó en marzo de 1982 a Cuba en la lista de Estados patrocinadores del terrorismo durante el gobierno del republicano Ronald Reagan. En esta "lista negra" - en la que actualmente también están Irán, Sudán y Siria- se incluyen a países que han ofrecido apoyo de forma reiterada a actos de terrorismo internacional.

Tras el acuerdo de diciembre, Obama pidió al secretario de Estado, John Kerry, que revise si Cuba debe ser o no excluida de la lista, como exige Castro. Kerry tendrá que entregar a Obama un informe en el plazo de seis meses y el presidente, por su parte, tendrá que informar al Congreso.

Si Washington decide sacar a Cuba de la lista, no sería el primer país en salir. Washington sacó de la lista a Yemen del Sur en 1990 cuando dejó de existir tras unificarse con el vecino Yemen del Norte, dando lugar a la actual República de Yemen. Irak, Libia y Corea del Norte tampoco están ya en la lista. (DPA)