Un comunicado del Departamento de Estado urge a los ciudadanos estadounidenses a evitar los viajes al Líbano "debido a las preocupaciones actuales por la seguridad".
Hoy, añade el comunicado, Washington "retiró el personal no esencial y sus familiares de la Embajada en Beirut debido a las posibles amenazas contra instalaciones y personal de la misión".
Otro comunicado advirtió a los ciudadanos estadounidenses que visitan o viven en Turquía que se ha retirado el personal no esencial y las familias del consulado general en Adana "debido a amenazas contra instalaciones y personal estadounidense".
La portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, agregó en una declaración que "dadas las tensiones actuales en la región, como asimismo las posibles amenazas para el personal y las instalaciones estadounidenses, estamos tomando estas medidas por cautela para proteger a nuestros empleados y sus familias, y a los empleados locales y visitantes de nuestras oficinas".
Los estadounidenses que se encuentren en el sudeste de Turquía y en Líbano deben limitar los viajes no esenciales dentro del país, deben mantenerse alerta a lo que ocurre en su entorno y deben hacer sus propios planes de contingencia, agregó Harf.