Esos cien millones se sumarán a otros 650 millones que Estados Unidos ya ha comprometido para paliar la emergencia humanitaria en el Cuerno de África, la más grave en el mundo actualmente.
"Acabar con el hambre no solo es posible, sino que es un imperativo moral y estratégico", subrayó Clinton durante un foro sobre seguridad alimentaria celebrado en el Departamento de Estado, en el que también participó el vicepresidente estadounidense, Joseph Biden.
Clinton recordó en su discurso que más de 13 millones de personas están en riesgo de morir de hambre y desnutrición en el Cuerno de África.
Dentro del Cuerno de África el país que más está sufriendo por la hambruna es Somalia, donde además las milicias islamistas de Al Shabab bloquean la llegada y distribución de la ayuda humanitaria.