La expansión de la cuarta economía de Asia se vio afectada por unas menores exportaciones en medio de la incertidumbre económica global, según el informe del emisor surcoreano, que recordó que en el trimestre precedente la economía había aumentado un 1.3 por ciento.
Respecto al mismo trimestre de 2010, el Producto Interior Bruto (PIB) de Corea del Sur creció entre abril y junio un 3.4 por ciento, su ritmo más bajo en cerca de dos años.
Según las previsiones del Banco de Corea, en la segunda mitad de este año el crecimiento se recuperará hasta un 1.5 por ciento tanto en el tercer como en el cuarto trimestre.
Por eso, el BOK surcoreano mantuvo intacta su previsión de crecimiento del PIB para 2011, que sitúa en un 4.3 por ciento.
"Las exportaciones de productos tecnológicos fueron débiles en el trimestre pasado principalmente porque los precios de las pantallas planas y los microchips aún no se han recuperado", explicó el director general de la división de Estadísticas del BOK, Kim Young-bae.
También se ralentizó el ritmo de los envíos al exterior, pero "en general el nivel de las exportaciones ha seguido siendo sólido", detalló Kim, en declaraciones recogidas por la agencia local Yonhap.
Según el BOK, las exportaciones, que representan cerca de la mitad del PIB surcoreano, aumentaron un 1.8 por ciento entre abril y junio respecto a los tres meses precedentes, lo que está muy por debajo del crecimiento del 3.3 por ciento que registraron entre enero y marzo.
Analistas surcoreanos destacaron que en la ralentización del crecimiento en el segundo trimestre también pesó, junto con el aumento de la incertidumbre económica global, la elevada inflación surcoreana, que afectó a la demanda doméstica.
El BOK prevé que en 2011 la inflación del país asiático se sitúe en el 4 por ciento.