El papa pide intercesión de la Virgen para la paz en la basílica de Santa María la Mayor

El papa Francisco participó este lunes en la ceremonia de solemnidad de la dedicación a la Virgen en la basílica de Santa María la Mayor de Roma, donde dio una homilía en que pidió su intercesión para la paz, "que solo es verdadera y duradera si parte de corazones arrepentidos y perdonados".

"De manera particular, durante el año próximo, Año Santo del Jubileo, serán muchísimos los peregrinos que vendrán a esta basílica a pedir la bendición a la Madre", dijo el pontífice en relación a la Virgen María.

"En referencia a eso, hoy nos hemos reunido aquí, como una especie de avanzadilla, e invocamos su intercesión por la ciudad de Roma y el mundo entero, sobre todo por la paz; la paz que sólo es verdadera y duradera si parte de corazones arrepentidos y perdonados", añadió el pontífice en Santa María la Mayor.

Este templo es uno de las cuatro basílicas de Roma con rango papal y tiene mucha importancia para Francisco. Será el lugar donde será enterrado tras su muerte, según decidió él mismo, a diferencia del resto de pontífices, sepultados en las grutas del Vaticano.

También es la primera vez que Francisco asiste a la celebración de la dedicación a la Virgen en Santa María Mayor.

Esta ceremonia se hace cada año el 5 de agosto. Se conmemora la nevada que, según la tradición católica, cayó sobre el Monte Esquilino de Roma el 5 de agosto del año 358, para indicar donde debía ser construido el primer templo dedicado a la Virgen María.

De acuerdo con la tradición, en la noche del 4 al 5 de agosto, esta se apareció en sueños al papa Liberio y le pidió que construyese una basílica en el lugar donde en aquella madrugada nevase.

Santa María la Mayor fue la primera basílica de Occidente en honor a la Virgen María, reconstruida en el 432 por el papa Sixto III.