"En torno a nosotros podemos decir que hay un caos externo, político y social con las guerras, y tantos y tantos niños que no tienen que comer, así como injusticias sociales", exclamó Francisco durante la catequesis.
Ante miles de fieles en una Plaza de San Pedro abarrotada, el pontífice pidió el fin de las guerras y recordó que este fin de semana se encontró "con niños y niñas que han sufrido heridas, han perdido las piernas y han padecido todo tipo de problemas físicos" a causa del conflicto en "la martirizada Ucrania".
"Niños y niñas que tienen que volver a aprender a caminar y que han perdido la sonrisa", manifestó, y pidió que se rece para que acabe la guerra en Palestina e Israel, así como Myanmar (Birmania), que es "una crueldad".
Y puso el ejemplo del beato polaco Stefan Wyszynski de quien demandó aprender "la generosidad en responder a la pobreza", incluida "las causadas por la guerra en tantos países".
Francisco se refirió también que hay un "caos interno" en las personas y que el externo "no puede curarse" si no se acaba primero con el interior, y sostuvo que el universo "sufre" porque el hombre "lo ha sometido a la esclavitud de la corrupción".
"El apóstol Pablo (...) habla de un universo que gime y sufre como con dolores de parto. Sufre a causa del hombre que lo ha sometido a la esclavitud de la corrupción", señaló.