De esos más de 700 millones de dólares recaudados, cerca de 400 millones corresponden a unas 800,000 donaciones de carácter privado que han llegado desde los 50 estados del país y de otras cien naciones, detalló la fundación que gestiona el Memorial.
Además, la fundación ha recibido otros 250 millones de dólares de fondos federales asignados por el Departamento de Vivienda a través de la Corporación de Desarrollo del Bajo Manhattan, así como otros 80 millones de dólares del estado de Nueva York.
"Los fondos han sido usados principalmente para la construcción del memorial así como el diseño y planificación del museo, mientras que los recursos restantes fueron a parar a tareas de mantenimiento y operaciones iniciales", detalló en un comunicado de prensa.
La fundación prevé que una vez que el museo abra sus puertas en 2013 tendrá unos costes operativos de hasta 60 millones de dólares anuales, de los que hasta el 30 por ciento estarán relacionados con medidas de seguridad "en un lugar atacado dos veces por los terroristas".
Desde su inauguración el pasado 12 de septiembre, más de 250,000 personas procedentes de diferentes partes de Estados Unidos así como turistas extranjeros han visitado el Memorial del 11-S, cuya entrada es gratuita, aunque hay que reservar por Internet.
El Memorial está presidido por dos imponentes piscinas emplazadas en el lugar exacto donde se alzaban las Torres Gemelas destruidas el 11-S después de que dos comandos terroristas suicidas de Al Qaeda estrellaran sendos aviones comerciales contra ambos edificios.
A su alrededor están grabados en bronce los nombres de las 2,983 personas que murieron el 11-S en Nueva York, y los fallecidos en el Pentágono, y en Pensilvania, así como los de los muertos en el primer atentado contra el World Trade Center en 1993.