La actual directora general, la diplomática búlgara Irina Bokova, parte como favorita, frente a los dos otros aspirantes, el embajador de Yibuti en Francia, Rachad Farah, y el profesor libanés Joseph Maïla.
El mandato de la directora saliente, que entre otros cuenta con el apoyo de los países de la UE y de Rusia, ha sido tan criticado como adulado por su gestión de la grave crisis presupuestaria abierta en 2011, cuando la última Conferencia General votó el ingreso de Palestina en el seno de la Organización.
Descontento con esa decisión, Estados Unidos, principal contribuyente, optó por no pagar sus cotizaciones del año en curso y de los dos siguientes, lo que redujo un 22 por ciento su presupuesto, amputado de 110 millones de euros cada año, y podría terminar con 300 empleos de los 1,428 existentes.
Farah Rachad, de 63 años, cuya candidatura fue propuesta por Uganda, en nombre de la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD) de África Oriental, goza del apoyo unánime de la Unión Africana (UA), según anunció el pasado enero este organismo.
El más atípico de los tres es el filósofo, investigador y ensayista libanés Joseph Maïla, de 64 años, director del polo "religiones" de la dirección de prospectiva del ministerio francés de Asuntos Exteriores entre 2010 y 2013 y defensor de la "solidaridad intelectual y moral" para la que se fundó la Unesco.
Sería el primer director árabe desde que se creó la Unesco en 1946.
La elección en el Consejo comienza a las 16:00 GMT, y podría tener que retomarse el lunes, si nadie obtiene mayoría absoluta en las cuatro primeras vueltas y hubiese que celebrar una quinta ronda, en la que bastaría ya la mayoría simple.
El proceso de elección de candidato, cuyo nombre se someterá a la votación de los 195 Estados miembros reunidos en la Conferencia General del 5 al 20 de noviembre, es completamente secreto. (EFE)