Las parejas de dobles de China, Corea del Sur e Indonesia fueron acusadas de "no poner en práctica todo su esfuerzo para ganar el partido" y de "comportarse de una manera claramente abusiva en detrimento del deporte".
Las deportistas implicadas son las chinas Wang Xiaoli y Yu Yang, campeonas mundiales, las indonesias Greysia Polii y Meiliana Jauhari, las surcoreanas Jung Kyung y Kim Ha-na y sus compatriotas Kim Min-jun y Ha Jung-eun.
La Federación Internacional de Bádminton informó de que las parejas de Indonesia y Corea del Sur han presentado una apelación para intentar evitar la descalificación.
Uno de los partidos bajo sospecha fue el de las chinas contra las surcoreanas, a la postre ganado por estas últimas por un claro 14-21 y 11-21.
El público comenzó a sospechar que algo ocurría cuando tanto chinas como surcoreanas empezaron a cometer varios fallos de saque consecutivos, o hicieron que en lances relativamente sencillos del juego el volante se quedara en la red o fuera de la pista.
El juego llegó a ser tan vergonzoso y los abucheos del público subieron tanto de tono que el árbitro del partido ordenó que se detuviera a mitad del primer set, para pedir a las dos parejas que se tomaran el encuentro en serio, según relató la agencia oficial china Xinhua.