Las lluvias constantes desbordaron ríos y afluentes, cuyos niveles habían aumentado por el embate de la tormenta tropical Irene.
El río Susquehanna, que recorre más de 650 kilómetros desde el norte del estado de Nueva York hasta la Bahía Chesapeake en Maryland, alcanzó niveles récord forzando a residentes a dejar sus casas y refugiarse en albergues.
El presidente estadunidense Barack Obama declaró estado de emergencia en Pensilvania este viernes para que la ayuda federal sea asignada.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) advirtió que el nivel del río a la altura de Wilkes-Barre, Pensilvania, alcance 12 metros este viernes, más de cinco metros por encima del nivel de desborde.
Autoridades confirmaron la muerte de cinco personas en Pensilvania, incluyendo un menor de ocho años que fue arrastrado por la corriente.
Cientos de carreteras y varios puentes fueron cerrados en la mitad oriental de Pensilvania, mientras el nivel de las aguas continua subiendo.
EL SMN asimismo mantuvo advertencia de inundaciones en los estados de Nueva Jersey , Nueva York, Pensilvania, Maryland y Virginia.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, estimó que las inundaciones afectarían más a la población que Irene.
La autoridades de Virginia confirmaron la muerte de dos personas en el condados de Fairfax y una más en Araundel debido a las inundaciones repentinas.
Tras las lluvias torrenciales e inundaciones, el transporte en la región de Washington continua en crisis y cientos de vehículos resultaron atrapados en las aguas.