En un comunicado remitido al diario vasco Gara, reiteró su compromiso con el proceso que cumplirá en breve cinco años y llamó a tener “paciencia estratégica, porque la debilidad política de quienes niegan la condición de nación y el derecho a decidir de la ciudadanía vasca es cada vez más evidente”.
Sin embargo, cuestionó que a casi cinco años de su declaración de final de la lucha armada, “no se han cumplido los mínimos entonces fijados y no se ha respondido como se debía a los asuntos que conforman la agenda de la resolución. Solo ETA ha cumplido su palabra”.
Por ello, consideró que la respuesta de España y Francia hacia su propuesta es “más que pobre” y la contrasta con el desenlace exitoso del proceso de negociación de Colombia, “que comenzó más tarde que la declaración de ETA y con algunas bases iguales”.
La organización debe abordar la situación de presos y de quienes están en el extranjero y no pueden volver al país con la “urgencia que se merece”.
Pidió “la suma de fuerzas y los acuerdos entre todos quienes apoyan el deseo de resolver el conflicto. Avanzando entre todos, hasta vaciar las cárceles, hasta traer a casa a todos los hermanos y hermanas diseminadas por el mundo”.