En una carta enviada el 30 de septiembre pasado a familiares del suboficial Edelio Morínigo, secuestrado en julio pasado, el EPP aseguraba que el policía estaba vivo, pero advertía que morirá si las autoridades no liberan a seis de sus militantes.
El plazo fijado por el EPP vencerá mañana martes, pero el gobierno del presidente Horacio Cartes descartó toda posibilidad de establecer una negociación con ese grupo irregular.
El 1 de octubre, el viceministro del Interior, Javier Ibarra, al responder a la propuesta del EPP, dijo el 1 de octubre: “Con esto quiero ser contundente: la política del gobierno es que no se negocia con delincuentes comunes ni de ninguna laya”.
“Esa posibilidad se descarta categóricamente; si no, tendríamos que irnos todos a nuestras casas y declarar desierto el Estado paraguayo”, además “no se puede en un Estado serio (...) ceder ante la presión de intereses comunes”, dijo.