Con la futura incorporación de Lituania, el número de miembros de la comunidad monetaria europea aumentaría a 19. Lituania es el único país báltico que todavía no forma parte de la eurozona. El pasado 1 de enero fue Letonia la que adoptó el euro como moneda nacional.
La entrada de Lituania en la eurozona aún tiene que ser aprobada por los ministros de Finanzas de la Unión Europea, que celebrarán su próxima reunión en julio.
La Comisión Europea elogió la "prudente política presupuestaria" que Lituania ha venido aplicando desde hace varios años, así como las reformas económicas que ha llevado a cabo el país báltico, de poco menos de tres millones de habitantes.
A pesar de tener ciertas reservas, también el BCE considera que Lituania está preparada para entrar en la eurozona. El guardián del euro afirma en su informe de convergencia que Lituania ha logrado controlar la inflación, el déficit presupuestario y la deuda pública. Sin embargo, para el BCE es motivo de preocupación la presión inflacionaria que se registre en el país báltico a medio plazo.
El primer ministro lituano, Algirdas Butkevicius, expresó su satisfacción por el dictamen de la Comisión Europea y el BCE, calificándolo como un reconocimiento a "nuestros esfuerzos concertados conjuntos y a nuestra labor consecuente".
En alusión a la crisis en Ucrania, Butkevicius subrayó que "la introducción del euro es un paso estratégico de Lituania" que contribuye a "la seguridad económica, financiera y política" del mayor de los tres países bálticos.
Por su parte, el ministro lituano de Finanzas, Rimantas Sadzius, apuntó la necesidad de "asegurar que el euro sea aceptado por los ciudadanos y que su introducción se produzca sin fisuras". (DPA)