El canciller guatemalteco, Haroldo Rodas, en la clausura de la Conferencia, anunció que "entre préstamos y donaciones" la comunidad internacional "respondió positivamente al llamado de Centroamérica", comprometiéndose a otorgar 2,000 millones de dólares.
El 80 por ciento de ese monto global corresponde a créditos blandos, en su mayoría de organismos financieros, precisó por su parte el ministro guatemalteco de Finanzas, Alfredo Del Cid.
El restante 20 por ciento fue ofrecido "en donaciones y apoyos técnicos como tecnología, capacitación, inversión y entrenamiento" para las fuerzas de seguridad de los países de la región, precisó Del Cid en una rueda de prensa.
La conferencia, en la que participaron 55 delegaciones de países y organismos internacionales, fue convocada por el Sistema de Integración Centroamericana (Sica) para presentar una estrategia conjunta para hacer frente al crimen organizado, las pandillas juveniles y el narcotráfico, que han convertido a la región en una de las zonas más peligrosas del mundo.
Al clausurar la reunión, iniciada el miércoles, el presidente guatemalteco, Álvaro Colom, expresó su satisfacción por los resultados, porque no solo se "consolidó la voluntad política" de los Estados centroamericanos para integrar "un frente común al crimen organizado" y el narcotráfico, sino también por el apoyo de la comunidad internacional.
"Los resultados vendrán en el corto, mediano y largo plazo", señaló Colom en referencia a las acciones previstas en la estrategia de seguridad aprobada.
Centroamérica, con una población de 45.7 millones de personas, de los que la mitad vive en la pobreza, registra en promedio una tasa de homicidios de 33.3 por cada 100,000 habitantes, la más alta del mundo, debido a la actividad de las pandillas y los carteles de la droga, según los expertos.