Brasil ofrecerá la residencia a 1,946 refugiados angoleños y liberianos

El Gobierno brasileño le ofrecerá residencia permanente a los 1,946 angoleños y liberianos que se encuentran en el país en la calidad de refugiados por considerar que ya no corren riesgo en sus naciones de origen, según un decreto publicado hoy en el Diario Oficial de la Unión.

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Según la Acnur, con la exclusión de angoleños y liberianos, el número de refugiados en Brasil se reducirá significativamente.

De los 4,656 extranjeros que viven en Brasil con el estatus de refugiados, 1,688 proceden de Angola y 258 de Liberia, y llegaron al país huyendo de las guerras civiles en sus naciones de origen.

La situación legal de esos extranjeros en Brasil será modificada debido a que el Alto Comisariado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) recomendó que sea suspendida en todo el mundo la condición de refugiados de los ciudadanos de Angola y de Liberia.

La cláusula de la Acnur, que cesa la condición de refugiados de los dos grupos con alcance global y que entró en vigor en julio, "fue adoptada con base en la paz y la estabilidad alcanzada en Angola y en Liberia tras varios años de sangrientas guerras civiles", según un comunicado del organismo de la ONU.

"Trabajamos con el Gobierno de Brasil para garantizar una solución permanente para esos refugiados, y la residencia permanente es la solución legal que les garantiza la posibilidad de integrarse definitivamente en el país", afirmó Andrés Ramírez, representante de la Acnur en Brasil, citado en el comunicado del organismo.

De acuerdo con el decreto publicado hoy por el Ministerio de Justicia, en el que se detallan los procedimientos para que los otrora refugiados obtengan la residencia permanente en Brasil, los angoleños y liberianos tendrán un plazo de 90 días a partir de hoy para presentar la respectiva solicitud ante la Policía Federal.

Para obtener el nuevo estatus, tendrán que presentar documentos con firma reconocida en notaría en que declaran que no responden a procesos judiciales ni a investigaciones policiales, y que no han sido condenados penalmente ni en sus países ni en Brasil.

Entre otras condiciones, tendrán que demostrar que viven en Brasil hace al menos cuatro años, que tienen un empleo formal o un negocio propio, o que fueron capacitados de instituciones reconocidas por el Gobierno.

Según la Acnur, con la exclusión de angoleños y liberianos, el número de refugiados en Brasil se reducirá significativamente y las nacionalidades que pasarán a encabezar la lista de refugiados en el país serán la colombiana y la congoleña.

Brasil analiza actualmente 1.461 solicitudes de refugio, en su mayoría procedentes de nacionales de países de África (742), Suramérica (342) y Centroamérica (217).