Mala calidad del aire persistente en el sur y sudeste de Asia en enero, según Copernicus

El sur y el sudeste de Asia sufrieron mala calidad del aire persistente durante enero, con neblinas generalizadas en Pakistán, norte de India, Bangladesh y Nepal y episodios de contaminación por partículas finas que cerraron escuelas en Bangkok (Tailandia), ha alertado este jueves el Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus (CAMS).

El servicio de Copernicus, el componente de observación de la Tierra del Programa Espacial de la Unión Europea (UE), ha señalado que los altos niveles de contaminación por partículas finas (PM 2.5) provocaron una neblina generalizada en el sur de Asia, que afectó a importantes centros urbanos como Nueva Delhi, Katmandú e Islamabad.

Las condiciones atmosféricas estables del invierno y la topografía de la región, combinadas con las emisiones locales procedentes de la quema de combustibles, el transporte y la agricultura, contribuyeron a un deterioro prolongado de la calidad del aire.

Desde que arrancó el año, las previsiones del CAMS han mostrado "sistemáticamente" concentraciones elevadas de PM 2.5 y otros contaminantes del aire en la superficie de la llanura indogangética, con "graves posibles impactos en la salud".

Las previsiones del CAMS mostraron episodios prolongados de valores a nivel del suelo superiores a 100 microgramos por metro cúbico en muchas zonas, cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS) apunta que deberían estar por debajo de 15 para limitar su impacto en la salud humana.

El Sudeste Asiático también enfrentó mala calidad del aire en enero, y en Bangkok (Tailandia) la persistente contaminación por PM 2.5 alcanzó "niveles peligrosos", lo que provocó el cierre de más de 350 escuelas y la introducción del transporte público gratuito para reducir emisiones y riesgos de exposición.

Estas condiciones fueron impulsadas por el estancamiento atmosférico y las emisiones de fuentes urbanas e industriales, y "ponen de relieve la naturaleza regional de los problemas de contaminación del aire y sus amplios impactos en la salud y la sociedad", según Copernicus.

Esto se produce tras un episodio de contaminación excepcional en noviembre de 2024, con episodios más leves durante diciembre, cuando las condiciones atmosféricas estancadas provocaron una contaminación "peligrosamente alta" en el sur de Asia.

"Los episodios de contaminación atmosférica grave como los observados en el sur de Asia en enero no son raros durante el invierno. Sin embargo, la intensidad y la persistencia de estos fenómenos subrayan la importancia de seguir monitoreando la atmósfera", ha señalado el director del Servicio de Monitoreo Atmosférico de Copernicus, Laurence Rouil. EFE