La legislación estaba prevista para entrar en vigor el 1 de julio próximo, pero los abogados que representan al territorio estuvieron de acuerdo en frenar ese paso hasta que se resuelva la disputa judicial.
Planned Parenthood, organización de planificación familiar defensora de los derechos reproductivos de las mujeres; y la rama de Iowa de la Unión Estadounidense de Libertades Civiles, presentaron una demanda contra el estado en mayo pasado, en la que tildan la prohibición de inconstitucional.
La ley, que fue promulgada por la gobernadora republicana de Iowa, Kim Reynolds, a principios del mes pasado, prohíbe la mayoría de los abortos cuando se detecte latido cardíaco fetal.
Según los expertos, este se puede escuchar por lo general a partir de las seis semanas de gestación y, con frecuencia, antes de que una mujer se percate de que está embarazada, lo cual convierte a la medida en la más restrictiva de su tipo en el país.
La normativa establece que los médicos deberán realizar una ecografía abdominal para evaluar el latido cardíaco del feto en cualquier mujer que busque un aborto y, si se detecta, no se puede avanzar con ese procedimiento.
Iowa prohibía la mayoría de los abortos después de 20 semanas, con lo que era uno los estados más severos en este sentido.
Pero, según el diario The Des Moines Register, muchos congresistas republicanos del territorio creen que era el momento de aprobar una legislación que podría avanzar a la Corte Suprema de Justicia y presentar un desafío para el fallo de Roe vs. Wade.
Ese histórico caso de 1973 despenalizó el aborto y determinó que las mujeres del país tienen un derecho constitucionalmente protegido a ese proceder.