En un comunicado leído por su portavoz, Ban Ki-moon expresó su preocupación por la escalada de actividades militares en muchas áreas de Damasco.
Además, la violencia en Daraya, Alepo e Idlib, así como en el norte de Homs está causando cada vez más víctimas civiles, apuntó Stephan Dujarric.
"El secretario general reitera su llamado a todas las partes del conflicto en Siria a evitar los ataques a la población civil. Los responsables de esos actos deberán rendir cuentas por sus crímenes", dijo el portavoz.
Ban también recordó a los actores del conflicto el acuerdo de cese de hostilidades y su responsabilidad de respetarlo, y exhortó a todos los Estados miembros de la ONU a emprender una acción coordinada, inmediata y decisiva para poner fin a la tragedia que se cierne sobre Siria.
Los atentados de hoy, perpetrados con sendas cadenas de explosiones en Jableh y Tartous, controladas por el gobierno sirio, estuvieron dirigidos principalmente a zonas de alta concentración de población alawita y fueron reivindicados por el grupo terrorista ISIS.