Estos jóvenes de Oaxaca, Veracruz y San Luis Potosí se inscribieron en noviembre de 2012 en respuesta a la VIII Convocatoria del Portal ¡VAS! de Oportunidades para participar en el concurso “Nada es Seguro, tu Seguro Sí”, de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros, A. C. (AMIS).
Para este certamen se registraron, a través de la Internet, más de mil 100 becarios de entre 15 y 22 años de edad, beneficiarios de Oportunidades, quienes respondieron una trivia relacionada a los riesgos que cotidianamente enfrenta la sociedad.
De ese universo, sólo tres jóvenes recibieron, el pasado 8 de mayo, sus reconocimientos de manos del presidente Enrique Peña Nieto, en el marco de la XXIII Convención de Aseguradores de México.
Los triunfadores (dos provenientes de comunidades rurales y uno de un barrio urbano) coinciden en que haber ganado este concurso es un paso adelante en sus esfuerzos por superar las condiciones de pobreza en que siempre han vivido sus familias.
“Sin el apoyo de Oportunidades no hubiera podido estar aquí para recibir este premio, porque las becas que nos dan me permitieron acceder a la educación. Siento que he dado un gran paso y que no voy a ir atrás”, dice Diana Ivette García Ruiz, de 18 años, del ejido mixe de Benito Juárez, municipio de San Juan Cotxocón, Oaxaca, quien recientemente concluyó el bachillerato y ya se alista para entrar a estudiar Enfermería.
En el ejido Benito Juárez, ubicado en la sierra norte oaxaqueña, viven 500 personas en casas sencillas que tienen luz eléctrica, pero no agua potable. La mayoría son campesinos y trabajan el maíz; también se dedican a cuidar animales en los pastizales. Desde esta comunidad, Diana Ivette viajó más de 10 horas hasta la capital de la República para dar a muchos otros jóvenes como ella el mensaje de que cuando se quiere, se puede.
Doña Raquel Ruiz, “madre y padre de Diana Ivette”, como ella misma se define, interviene para decir que “todo nos queda lejos en el pueblo”, pero confía en que todo ha valido la pena con tal de acompañar a su hija a recibir su reconocimiento como ganadora.
Doña Raquel es de fácil palabra y se ruboriza cada vez que habla con orgullo de los logros obtenidos por sus hijos, porque “vivir y crecer entre montañas no es fácil, pero gracias a Oportunidades mis hijos están estudiando”.
“Yo sólo llegué hasta la secundaria, pero Diana tiene muchas ganas de salir adelante; ya hasta pudo saludar al presidente Peña… Tengo otra hija de 20 años que está en el sexto semestre de la Universidad, en Ingeniería en Sistema Computacionales, con su beca de Pronabes, y un niño de quinto año, con beca de Oportunidades, programa que ha sido mi fortaleza desde hace 10 años”.
Otra de las ganadoras, Nora Eliza Toral Ramírez, de 17 años, es procedente de Santa Cecilia, en Actopan, Veracruz, y es becaria de Oportunidades desde los tres años de edad; actualmente cursa el bachillerato en el CBTIS 261, con la especialidad en Contabilidad.
Además del apoyo económico, Oportunidades le ha permitido continuar sus estudios y conocer a muchas personas, pero considera que lo más importante ha sido darse cuenta de lo que hay detrás de un programa federal.
“Cuando eres pequeño, tu mamá te lleva a la clínica de salud o a la escuela y tu reniegas, porque no te das cuenta de muchas cosas. Conforme vas creciendo cambia tu forma de ver el mundo. Por ejemplo, yo soy beneficiaria de Oportunidades desde muy chica y hasta ahora me doy cuenta de que atrás de todo este proyecto hay muchas personas que ayudan, que están comprometidas y convencidas de lo que están haciendo por los demás. Estoy muy agradecida con el programa”, dice.
Juan Ramón Cruz Espinosa es oriundo de San Luis Potosí. Con 15 años de edad, es alumno del Colegio de Bachilleres 28 y presentó en el Portal ¡VAS! un ensayo sobre “Riesgos”, donde aborda el tema de la inseguridad.
Relata que sin los apoyos de Oportunidades, yo hubiera tenido que trabajar para seguir estudiando. Hoy gané este concurso y tengo el reconocimiento del presidente. Estoy contento. En mi colonia deben estarlo también.
Con su actitud y su forma de ser, explica, quiere decir a los jóvenes que “si uno tiene iniciativa puede salir adelante. Te puedes caer, pero debes seguir adelante, nunca darte por vencido”, concluye.