Los historiadores Oliver Rathkolb, Fritz Trümpi y Bernadette Mayrhofer difundirán el martes sus conclusiones en la página digital de la institución, coincidiendo con el 75 aniversario de la anexión de Austria por parte de la Alemania nazi.
El director de la Filarmónica, Clemens Hellsberg, el historiador Oliver Rathkolb y los directores Franz Welser-Möst y Zubin Mehta participan esta noche en la presentación de un documental sobre el pasado de la orquesta y quizá se ofrezca un avance del contenido del informe redactado por los historiadores.
Uno de los asuntos que han hecho revivir la polémica es la reciente revelación de que se entregó la réplica de un anillo de honor de los filarmónicos al criminal de guerra nazi Baldur von Schirach cuando salió de la cárcel en 1966.
También se ha criticado que en página digital de la Filarmónica dedicada a su historia apenas se mencione la época nazi ni cite por su nombre a los seis músicos judíos expulsados de la orquesta que murieron en campos de exterminio.
Tampoco se menciona en la web con claridad que el Concierto de Año Nuevo de la Filarmónica se creó en 1939, en plena época nazi, por iniciativa de Clemens Krauss, un amigo íntimo del ministro de Propaganda nazi Joseph Goebbels.
El historiador y diputado de Los Verdes Harald Walser, el mayor crítico de la Filarmónica en este aspecto, explicó recientemente a Efe que la institución se resiste a esclarecer por completo su pasado y solo actuaba bajo presión mediática.
El director de la Filarmónica de Viena, Clemens Hellsberg, es autor de uno de los libros canónicos sobre la historia de la orquesta, publicado en 1992 con el título de "Democracia de reyes".
Allí ya se recogía que tras la anexión de Austria por la Alemania nazi, once miembros judíos de la orquesta fueron expulsados y seis de ellos murieron en campos de exterminio.
Según ese libro, casi la mitad de los 112 filarmónicos estuvieron afiliados al partido nazi. Los músicos estuvieron excluidos del frente y a cambio dieron conciertos propagandísticos en honor al Führer en territorios ocupados por las tropas hitlerianas.
Tras la guerra, la orquesta mantuvo a la mayoría de sus cincuenta miembros nazis y algunos ejercieron cargos de gran responsabilidad.