A nombre del Estado mexicano, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, expresó la disculpa por la violación a sus derechos en el marco del uso excesivo de la fuerza, por el que fueron privados de la vida los jóvenes.
“Jorge Antonio Mercado Alonso y Francisco Arredondo eran estudiantes de excelencia, no sicarios. Por mi conducto el Estado hace el compromiso de garantizar la reparación integral del daño…, así como implementar las medidas de no repetición para que los hechos que violentaron sus derechos no vuelvan a suceder a ninguna otra persona en nuestro país”.