El fuero constitucional tiene su fundamento en el artículo 61 de la Constitución Política, que establece la inviolabilidad de los diputados y senadores por las opiniones que manifiesten en el desempeño de sus cargos, así como que jamás podrán ser reprendidos por ellas.
Al respecto, el coordinador del Grupo Parlamentario del Partido de Acción Nacional, Gustavo Madero Muñoz, apunta que en la actualidad el fuero concedido a los legisladores se ha desvirtuado por completo.
Señala que prueba de ellos son las consideraciones expuestas en el dictamen del Constituyente de Querétaro, fechado el 30 de diciembre de 1916 en el que claramente se advierte que “la inviolabilidad que se concedió a los legisladores se limitaba a protegerlos en el ejercicio de la función legislativa, es decir, al momento de proponer una reforma que de alguna manera pudiera considerarse que trastornara el orden público o hiciera apología de un delito. El espíritu y motivación del Constituyente de 1917 no tenían como objeto proteger al legislador de delitos o abusos de poder que éste pudiera cometer.”
El también presidente de la Junta de Coordinación Política advirtió que en el contexto de la discusión de la reforma política, los senadores deben afrontar el reto de eliminar aquellas disposiciones que generen impunidad.
“Los senadores debemos dar el ejemplo y permitir la posibilidad de que estemos en igualdad de condiciones que cualquier ciudadano, para responder ante la justicia por la comisión conductas ilícitas que deriven en procesos penales, sin necesidad de esperar el trámite de la declaración de procedencia establecido en el artículo 111 de la Constitución”, explicó el legislador panista.
Precisó que “los legisladores somos representantes ciudadanos y estamos obligados a ejercer nuestro encargo con responsabilidad. El fuero debe limitarse a garantizar la inviolabilidad de los senadores y diputados por la manifestación de sus opiniones en el desempeño de sus cargos, pero de ninguna manera debe servir de pretexto para que aquellos que violen la ley, cometan un delito o abusen del poder eviten rendir cuentas ente la sociedad”.
Por ello, el senador Madero, a través de una iniciativa con proyecto de Decreto por el que se reforman los artículos 61 y 111, propone retomar el espíritu que motivó a los constituyentes de Querétaro y precisar que la inviolabilidad en la manifestación de opiniones de que gozan los senadores y diputados al Congreso de la Unión, debe apegarse estrictamente a su trabajo legislativo, y se elimina del segundo párrafo del artículo la figura del fuero constitucional.
Asimismo, plantea que los funcionarios a que se refiere el primer párrafo del artículo 111 de la Constitución sean responsables por los delitos graves que cometan durante el tiempo de su encargo.
Las demás reformas propuestas para el artículo 111, tienen la finalidad de eliminar la figura de la declaración de procedencia.