Benedicto XVI "ha abierto la puerta a los papas eméritos, algo que antes no existía", comentó el actual sumo pontífice de la iglesia católica.
De ese modo, señaló que su antecesor, al renunciar al papado, sentó precedente para quienes asumieran el cargo al frente de la iglesia en el futuro.
Si un papa siente debilitar sus fuerzas, debe plantearse las mismas preguntas que Benedicto, dijo Francisco. Durante el vuelo de regreso a Roma, el papa se refirió además a la pedofilia, que, subrayó, no merecerá ninguna tolerancia ni adjudicación de privilegios a los acusados a la hora de ser juzgados, y también habló sobre el celibato.
A este respecto, señaló que las puertas están abiertas para el debate, pero que la iglesia en este momento tiene otras prioridades.
A principios de junio Francisco celebrará una misa en la residencia de Santa Marta junto con ocho víctimas de abusos cometidos por miembros de la iglesia.
La primera "conferencia de prensa en vuelo" que dio el papa argentino fue al regresar el año pasado de la Jornada Mundial de la Juventud Cristiana, celebrada en 2013 en Brasil.