“Otorgar el 20 por ciento de la recaudación participable a los Estados, los cuales a su vez entregan a sus municipios el 20 por ciento, significa que de cada peso que recibe la Federación, sólo 20 centavos se destinan a los Estados, y de esos sólo 4 centavos a los municipios. Por ello es inequitativa e insuficiente su distribución”, expresó.
El parlamentario perredista indicó que el actual porcentaje del Fondo General de Participaciones favorece a los Municipios con mayor grado de desarrollo y población, pero rezaga cada vez más a los Municipios con alta marginalidad. Por ello insistió en que debe reformarse la Ley de Coordinación Fiscal para aumentar del 20 al 30 por ciento dicho Fondo.
Informó que la deuda en proporción con las participaciones federales alcanza un promedio de 86 por ciento a nivel nacional, pero hay estados cuyas proporciones son mucho mayores. Por ejemplo, para Quintana Roo alcanza el 269.5 por ciento, Chihuahua el 228 por ciento, Nuevo León 220.6 por ciento y Veracruz el 133.31 por ciento.
Éstas y otras entidades siguen incrementando su deuda pública con el objetivo de ampliar su frontera de provisión de bienes y servicios, ya que sus participaciones de acuerdo a sus necesidades son verdaderamente escasas.
Por ello propuso reformar el artículo 2º y 6º de la Ley de Coordinación Fiscal para que el porcentaje del Fondo General Participable aumente del 20 al 30% y con ello evitar los recortes a la inversión pública en sectores sociales básicos como educación, salud, seguridad, infraestructura y otros, con el propósito de lograr mayor crecimiento económico, así como evitar la marginación y la pobreza extrema en las zonas rurales del país.
El legislador del sol azteca agregó que de no llevarse a cabo esta modificación, se corre el riesgo de restringir el acceso a los servicios que requiere la población y que prevalezca la polarización social a causa del aumento del endeudamiento público, poniendo en riesgo la estabilidad económica de los Estados y Municipios del país.
“La redistribución de la riqueza y el fomento al desarrollo de las diferentes regiones del país depende del incremento en la asignación del porcentaje de las particiones federales. Si queremos combatir la pobreza y la desigualdad social, debemos contar con un Sistema de Coordinación Fiscal mucho más equitativo”, concluyó.