Resaltó que para su gobierno revertir los escenarios de pobreza, de rezago social, y lo más lacerante, el hambre que se padece entre millones de mexicanos “no resulta sólo una prioridad sino es la razón más importante del quehacer gubernamental”.
Éste es un gobierno que quiere cambiar esa condición, añadió, “y que quiere lograr el México incluyente y de oportunidad para todos los mexicanos”. Para mi gobierno, enfatizó, “resulta de la mayor prioridad ocuparnos del tema que éticamente, moralmente, debe estar en la prioridad de toda política: trabajar por quienes más lo necesitan”.
En el evento, el expresidente de la República Federativa de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, invitado de honor al inicio de las acciones de la Cruzada, recalcó que su presencia en Chiapas obedece a que viene a dar testimonio de que sí es posible acabar con el hambre; “en Brasil lo hice, estoy seguro que usted lo hará en México, este país extraordinario, de historia extraordinaria, este país que albergó la civilización más importante del mundo”, dijo al presidente Peña Nieto.
El exmandatario brasileño, creador del Programa Hambre Cero en aquella nación, recordó que padeció críticas de sectores de izquierda y de derecha en su país “de ser éste un programa asistencialista en el que se le daba limosna a la gente y ocasionaría se hicieran perezosas, o que era poco dinero el que se destinaba a cada persona”. Lula Da Silva precisó: “yo decía, es poco, sí, pero para quien tiene mucho, mas para millones y millones de madres brasileñas que iban a dormir sin darle un vaso de leche a sus hijos y sin un pan que darles por la mañana, para ellas, 50 dólares era suficiente para saciar el hambre de sus hijos”.
El presidente Peña Nieto destacó que en el país “han empezado las críticas, han empezado las descalificaciones de aquellos a quienes ocupa y preocupa la política y las elecciones. Pero nosotros, este gobierno, tenemos un objetivo claro, una tarea comprometida con los mexicanos que es acabar con el hambre. Que sigan aquellos criticando las acciones”, expresó, “porque a otros los ocupa las elecciones; a nosotros nos ocupa y nos compromete acabar con el hambre de México”.
Insistió en que “el hambre de México, que hay que reconocer viven millones de mexicanos, no tiene partido, no tiene color, no tiene interés partidario”.
El titular del Ejecutivo federal precisó que quienes padecen hambre viven en una realidad que para los mexicanos es inadmisible y debe llevarnos a que sumemos esfuerzos; “y por eso esta convocatoria que hemos lanzado a todos los mexicanos para que hagamos converger nuestros esfuerzos en atender núcleos sociales que padecen hambre, que no les preocupa u ocupa otra acción o actividad, y menos de carácter político”.
Explicó que la Cruzada Nacional Contra del Hambre “de lo que se trata es de que siete y medio millones de mexicanos de 400 municipios del país puedan revertir este escenario, esta condición, y podamos garantizarles un mínimo y básico de bienestar social que les permita vivir con dignidad”.
Puntualizó que la Cruzada convoca al esfuerzo de todas las dependencias del gobierno federal, en coordinación con los gobiernos estatales y municipales.
Mencionó que el expresidente de Brasil tuvo éxito en su país y logró que 33 millones de brasileños abandonaran la condición de pobreza; “aquí estamos decididos a que siete millones y medio de mexicanos abandonen esta condición y vivan con dignidad”.
